Sin más preámbulos, un ejercicio maravilloso que después analizaremos con calma.
La verdad es que se veía venir. No hablo de que se veía venir la propuesta de matrimonio. Hablo de que se veía venir que tarde o temprano este fenómeno iba a convertirse en el argumento perfecto para una nueva serie de televisión.
Lo interesante es que quedan diversas preguntas en el aire, que valdría la pena que aquellos que nos preocupamos por lo social pensáramos: ¿Qué hace que una persona quiera exponer su vida, su intimidad de semejante forma? ¿Qué motiva a que estas sociedades contemporáneas se agrupen de semejante forma en eventos como este? ¿Acaso la agrupación colectiva no es más que una forma de tratar de enfrentar y enmascarar la soledad?
¿Cuál es el nuevo mundo en que vivimos?
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